Sábado, 29 de abril del 2005
Seguimos sin tener noticias del exterior, y además, hay una anciana que está muy mal.
Domingo, 30 de abril del 2005
Hoy ha sido un día terrible. La pobre anciana ha muerto en mis brazos sin que pudiera hacer nada por impedirlo, esto nos ha creado a todos un profundo desánimo. Ha reinado el silencio durante toda la tarde, hasta que hemos tenido que ayudar a un niño pequeño que iba a morir aplastado por una viga enorme. ¡Gracias a Dios que hemos podido sacarle de allí!
No hay comentarios:
Publicar un comentario