miércoles, 23 de marzo de 2011

El Robo del Banco Central

Son las doce de la noche en Londres, en la calle del banco central todo está en calma, se puede ver a la gente paseando y de vez en cuando un coche circulando por la calle central. De pronto, un coche rojo cruza a toda velocidad la calle paralela al banco, acto seguido el coche se mete precipitadamente en un callejón en la parte derecha del banco y dos hombres se bajan de el.

Uno de estos individuos dice con un tono de voz susurrante: - Aprisa Mike trae los explosivos. – Ya voy jefe. Contesta el otro. Los dos individuos se meten en el banco por un agujero hecho en la ventana del callejón. Cinco minutos más tarde los dos enmascarados se encuentran en el vestíbulo principal colocándose unas máscaras anti-gas. A continuación se deslizan hacia la sala de las cajas fuertes, uno de los ladrones tira contra el suelo una granada de humo, de repente, todos los láseres de la sala quedan visiblemente localizados por los malhechores que utilizando un espejo los desvían uno tras otro, los ladrones llegan sin esfuerzo a las cajas acorazadas. Uno de ellos saca de un maletín un aparato similar a unas tijeras de podar con un periscopio  que introduce con mucho cuidado debajo de una de las cajas para cortar los cables de las alarmas. Cuando el que ha cortado los cables le hace una señal, el otro ladrón con un soplete  comienza a romper las bisagras. Unos minutos más tarde los ladrones estaban vaciando las cajas fuertes que contenían 3.000.000 $ cada una. Uno de ellos dice:- Jefe, ¿colocamos ya los explosivos? El otro afirma con un movimiento de cabeza, y sin perder ni un solo segundo coloca dinamita y explosivos en todas las columnas de la sala en la que se encontraban.
Cuando salieron del banco con los sacos de dinero y se alejaron del banco a toda velocidad en el coche el jefe sacó del bolsillo una especie de mando a distancia y oprimió un botón rojo, unos segundos más tarde una violenta explosión voló el banco en mil pedazos.
Unos días más tarde el asunto del banco robado era investigado por la policía londinense que buscaba desesperadamente a los ladrones que por desgracia para la policía ya se hallaban completamente fuera de su alcance en los Estados Unidos despilfarrando los más de 9.000.000.000 $ en coches caros, negocios, edificios, etc.

1 comentario:

  1. Muy bien redactado Eduardo, sigue escribiendo cuentos tan entretenidos.

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